Aquí esta, el modelo que celebra los 100 años del nacimiento de Ferruccio Lamborghini. Y muestra su cara de fibra de carbono y llamativos acentos amarillos al mundo en el Salón de Ginebra. Y he de decir que su estética me resulta muy elegante y al mismo tiempo tremendamente agresiva, algo similar a lo que ocurre con el Huracán, pero de una forma más radical.
El Centenario está basado en el Aventador, pero muy mejorado, sobretodo en el apartado aerodinámico. Su esculpida carrocería, claramente diferenciada de la del Aventador cuenta con llamativas aletas acentuadas en amarillo y una alerón móvil muy generoso. De hecho es tan diferente que con los nuevos voladizos más largos mide 14 centímetros más que el modelo estándar del Aventador. Y como solo mide 1,14 metros de alto la linea de cuña ahora se acentúa incluso más. Un vivo ejemplo del "Wedge Design" de los años 60 y 70 trasladado a nuestros días.
Y como al V12 le queda mucho que decir en este superespecial es capaz de desarrollar 770 CV. Su peso se contiene en 1520 kilogramos, gracias a su construcción en fibra de carbono de carrocería y monocasco. Todo esto le permite alcanzar los 100 km/h desde parado en tan solo 2,8 segundos, 23,5 segundos de 0 a 300 km/h, y lograr una velocidad máxima superior a 350 km/h. Los magníficos frenos carbono-cerámicos lo paran desde 100 km/h en solo 30 metros. Aunque sería imposible lograr estas metas sin los neumáticos que Pirelli ha diseñado exclusivamente para este modelo y que calzan sus llantas de 20 y 21 pulgadas delante y detrás respectivamente.
El exuberante diseño exterior se traslada al interior, el cual de paso nos adelanta detalles que posiblemente veamos en modelos futuros de Sant'Agata. Mucho lujo y deportividad, resaltados con alcántara y carbono por doquier. Negro con acentos amarillos y diseños futuristas, sobretodo en el diseño de las interfaces electrónicas, como indicadores o la pantalla de la consola central de 10,1 pulgadas.
Tan solo se harán 40 unidades del Centenario, a un precio podemos imaginar desorbitado, aunque ya están todas vendidas. 20 serán coupes y 20 roadsters, aunque la variante abierta habrá que esperar un poco más para verla.
Galería:
Y como al V12 le queda mucho que decir en este superespecial es capaz de desarrollar 770 CV. Su peso se contiene en 1520 kilogramos, gracias a su construcción en fibra de carbono de carrocería y monocasco. Todo esto le permite alcanzar los 100 km/h desde parado en tan solo 2,8 segundos, 23,5 segundos de 0 a 300 km/h, y lograr una velocidad máxima superior a 350 km/h. Los magníficos frenos carbono-cerámicos lo paran desde 100 km/h en solo 30 metros. Aunque sería imposible lograr estas metas sin los neumáticos que Pirelli ha diseñado exclusivamente para este modelo y que calzan sus llantas de 20 y 21 pulgadas delante y detrás respectivamente.
El exuberante diseño exterior se traslada al interior, el cual de paso nos adelanta detalles que posiblemente veamos en modelos futuros de Sant'Agata. Mucho lujo y deportividad, resaltados con alcántara y carbono por doquier. Negro con acentos amarillos y diseños futuristas, sobretodo en el diseño de las interfaces electrónicas, como indicadores o la pantalla de la consola central de 10,1 pulgadas.
Tan solo se harán 40 unidades del Centenario, a un precio podemos imaginar desorbitado, aunque ya están todas vendidas. 20 serán coupes y 20 roadsters, aunque la variante abierta habrá que esperar un poco más para verla.
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